viernes, 9 de abril de 2010

7 problemas a la hora de formatear un ordenador

Plantar un árbol, escribir un libro, tener un hijo, formatear un ordenador…

1) BACK UP: Antes de comenzar a borrarlo todo, debemos conservar aquellos archivos que aún nos interesan. Pero hacer copias digitales de estos datos despierta muchas sensaciones encontradas: Sinceridad. “¡15 Gigabytes de música, 3347 temas de artistas nacionales e internacionales, 204 bandas de todo el mundo... ¡Y sigo escuchando a Julio Iglesias!” Superación. “Todavía tengo sus fotos. ¿Para que las sigo guardando? son como 100 megas de amor no correspondido. 100 megas son como tres cds más de Julio Iglesias... ¡Este por lo menos me canta al oído cuando la extraño!” Recuerdos. “Haciendo back up encontré con sus mails viejos. Si le paso el antivirus… ¿Me vuelve a llamar?” Sorpresa. “Llamó el tío Cholo... ¡El fin de semana viene a buscar las fotos que acabo de borrar para siempre!” Necesidad. “Revolviendo cds viejos me pregunto: ¿Para qué cds si todo está en torrents?” Paso del tiempo. “¡Ni por todo el oro del mundo tiro este Pc futbol 6.0 con Maradona con la diez de Boca Juniors!”

2) FORMATEO: Una vez que ya hemos copiado todo lo que creemos de verdadera importancia, llega la hora de borrarlo todo. Pero la aventura recién comienza: Respuestas. “Preguntas picaras que hace el formateo y que uno no tiene idea como responder: ¿NTFS o FAT 32?... ¿Acaso yo te pido consejos sobre mi trabajo?”. Progreso. “Superado el 50% del formateo. En estos momentos me dan ganas de hacer experimentos. ¿Meto o no meto una feta de jamón crudo en la grabadora de Dvd?”. Secreto. "¿Por qué estas formateando la maquina, cariño?" pregunta mamá. Y yo "es que encontré unas fotos muy chanchas que quiero borrar para siempre de este mundo". Realidad. “¿Cómo sabe uno que su maquina contenía demasiado porno? Porque cuando Windows te pregunta si quieres FAT 32, te imaginas una gordita treintañera”. Confusión. “Luego de formatear no me llegan más mails desde el sitio oficial de Viagra... ¿Entonces no fue una pesadilla?”. Tentación. "¿Particiono todo el disco o dejo un espacio para guardar mis secretos? Otra pregunta: ¿A quién demonios le interesan mis secretos?”. Arrepentimiento. “El ordenador volvió a formatearse sin ninguna razón. En estos momentos pienso: ¿Tanto me molestaba esperar un minuto más para que arranque Windows?”.


Llegó la hora del formateo.

3) SISTEMA OPERATIVO: Llega el momento de instalar el sistema operativo que le dará vida a nuestro ordenador. Proceso mucho más difícil de lo que comúnmente se piensa: Decisión. “¿Es momento de probar otro sistema operativo? ¿Qué pasa si un SO nuevo no me deja jugar al Carmen Sandiego? ¡Formateo todo de nuevo, obvio!”. Prevención. “Acaba de arrancar el cd de Windows XP. Esta muy rayado. ¿Me instalará el Buscaminas?”. Cansancio. “Ha terminado el formateo. Ahora a rellenar planillas con datos y elegir opciones que uno no sabe para qué sirven. ¿Qué parte de “Instalale el equispe, instalale” no entendió este anteojudo millonario?” Afecto. “Comenzó la instalación de Windows XP. Es viejo, el cd está rayado, siempre hay que andar actualizándolo, pero es como aquel amigo que te deja que completes su Corazones sin pedirte nada a cambio”. Pasado. “Escribiendo el código de activación de Windows me he quedado pensando... ¿Le habré errado a alguna letra con esta muchacha que conocí en el bar?” Expuesto. “Poniendo nombres de red, franja horaria, conversión de monedas... ¡Si le sigo dando más datos Bill va a venir a tomar el té a mi casa!”.


Instalando el sistema operativo... un mundo de sensaciones.

4) VACIO: La primera imagen del escritorio vacío es algo que nunca se olvida. Todo está por hacerse. Debes erigir tu imperio… nuevamente: Angustia “¡Dios mío! ¡Me olvidé de guardar las fotos del casamiento de mi hermano!”. Vivir el presente. “Arranco Windows XP. Limpio y sin problemas. Se parece a la primera novia: se ve bien, se mueve bien, funciona conmigo. Mejor disfrutar de estos momentos. Pronto su papelera se empezará a llenar de basura, no me dejará instalarle cosas y se volverá problemática hasta el hartazgo. Será entonces momento de formatearla por otra...”. Promesas. “A pesar de tantos años el Windows XP sigue prometiéndome un mundo de sensaciones: minutos de angustia cuando se ralenta, furia al trabarse, tristeza cuando no ejecuta algún programa…”. Desconsuelo. “Una vez más me vuelvo a arrepentir de no instalar los "hermosos" temas de Windows XP que transforman el puntero del mouse en una rana, una estrella de mar o en una porción de pizza de anchoas”. Responsabilidad. “El escritorio está vacío, como un departamento de vacaciones que nos recibe ordenado y limpio... ¿Cuánto tardare en vomitarle bits de programas que no sirven para nada?”. Testigos. “No, sin dudas empezar a ver páginas pornográficas con una PC vacía de cookies no puede ser el crimen perfecto...”.


El escritorio vacío: un sueño hecho realidad.

5) DRIVERS: Para que el ordenador comience a darnos señales de vida es necesario instalarle sus drivers. Todos lo sabemos: jamás resulta una tarea simple. Renovarse. “Es momento de bajar los últimos drivers, igual dentro de un par de horas mi PC vuelve al asilo de ancianos... ¡Que alguien detenga esta maldita evolución tecnológica!”. Sin derecho. “A instalar drivers... ¡Para que el ordenador me maneje a su antojo!”. Excusa. “Ya tengo una nueva mentira para el boliche. "¡Ey! ¡Me acabas de tocar el trasero! ¿Estás borracho?" "No, disculpa... es que tengo desactualizado los drivers, muñeca..." Indignación. “Mi teclado tiene un mísero botón que abre el Word treinta minutos después de apretarlo y me pide los drivers. ¡No tiene vergüenza!”. Poder. “Conecté la impresora HP que tiene puerto USB. La maquina la recibió sin chistar, la reconoció y ni le pidió los documentos... ¿Lo que es ser amigo del dueño, no?”. Estafa. “Cuando pido que me instale el driver, señor HP, instáleme solamente el driver. ¿Qué le hace pensar que voy a cambiar mi sumiso Paint por su complejo e inmanejable programa de fotografía?" A terapia. “El ordenador me pide un driver para un componente que verdaderamente no tiene dentro... ¿Tendrá un embarazo psicológico?”. Búsqueda. “Encuentro drivers que no sé de qué año ni componente son... ¿O será que tanto tiempo delante del ordenador me carcomió la parte del cerebro encargada de los recuerdos a corto plazo? No, si pude recordar un remate tan largo seguro que no sirven para nada”.



6) PROGRAMAS: Llega el momento de conseguir e instalar la serie de programas que necesitas para comenzar a utilizar tu ordenador. Pero bien sabes que esta tarea no termina nunca: Puesta a punto. Programas que hay que volver a bajar: Msn, Winamp, Winrar, KMPlayer... Páginas que hay que volver a poner en favoritos: Yahoo, Neoteo, Google, Youporn...”. Juramento. “Juro que no voy a bajar programas inútiles. Juro que no voy a bajar programas inútiles. Juro que no voy a bajar programas inútiles… Es que ese perrito que mueve la cabeza cada vez que toco la tecla "R" es taaan tentador...”. Olvido. “¿Cuál era la dirección de esa web de señoras mayores muy p... muy prestas a brindarme información sobre el cuerpo humano?”. Pasos previos. “Cada página de internet pide que se instalen una serie de programitas para poder navegar correctamente. ¿Acaso no aprendieron nada del Paint que te abre todos los archivos sin dejar de ser un esclavo de la corporación Microsoft? ¡Inservible pero servicial!”.


Los programas que tu ordenador necesita.

7) EL POST FORMATEO: Apenas terminamos de instalar todo lo necesario no tardan en aparecer los primeros errores del ordenador. La felicidad no es eterna. Primer error. “msiexec.exe debe cerrarse. Eso es no saber guardar secretos. Antes se te apagaba la máquina a tres acciones antes de finalizar el Maniac Mansion y jamás te enterabas por qué... ¡Ordenadores eran los de antes!” Justicia. “Mi panel de agregar o quitar programas comenzó a llenarse de desconocidos. Como cuando hay reducción de personal en una empresa los voy a echar sin asco. ¡Esta máquina se está llenando de estafadores digitales!”. Curioso. “Error de Windows arreglado actualizando Windows... Sospechoso como que te regalen un par de zapatos de a uno por año”. Nunca acaban. “Problemas con la impresora. Algo de Windows Installer que me pide actualización. No sé por qué razón no me carga los videos de Youtube… Y yo que pensaba ver Dr. House esta noche...”. Preguntas filosóficas. “¿Cuando Bill Gates se muera va a ver una luz blanca o una pantalla azul que diga "Error de sistema”?” Actualizaciones. “Windows me exige un antivirus. ¿Quién se cree que es? ¿Acaso tú le pides los documentos a cada chica que conoces en el boliche?”. Cansancio. “El ordenador comenzó a pedirme que lo reinicie. Yo ya estoy harto. ¡Alguien que le apriete Ctrl+Alt+Supr a mi vida!”.

Luego de culminar con la instalación de todos los complementos de nuestra PC, el usuario cae en una profunda crisis existencial de la cual le es casi imposible salir. Se siente muy deprimido y quiere abandonar por completo el mundo de la computación. Como en Neoteo apreciamos a nuestros lectores, le brindaremos la solución a todos sus problemas: ¡FORMATEAR EL ORDENADOR OTRA VEZ!

No hay comentarios: